Disponibilidad:
1 en stock
15,00 €
14,25 €
El objetivo principal de este libro es tomar conciencia de todo aquello que, técnica o emocionalmente, influye en la mejora de la comunicación oral. Porque, no lo olvidemos, todo comunica; incluso cuando decidimos permanecer en silencio.Interpretar correctamente los mensajes del otro mediante una escucha activa, enriquecer nuestra capacidad expresiva sea cual sea el contexto que se nos presente o saber adaptarse a los diferentes públicos son cuestiones que en teoría parecen sencillas, pero se necesita práctica, preparación y constancia para eliminar costumbres nocivas en el terreno de la comunicación y adquirir nuevos hábitos que nos permitan disfrutar, sin tensiones ni miedos escénicos, de la participación en un coloquio, una ponencia, un compromiso social, o cualquier acontecimiento (la mayoría) en el que el lenguaje sea el protagonista.Precisamente, los protagonistas de este libro son personajes con los que alguna vez nos hemos identificado. ¿Cuántas veces hemos dejado de asistir a un evento porque los posibles acompañantes no se han acabado de decidir? ¿Quién no ha rebuscado en su cerebro las palabras oportunas con las que amenizar, sin parecer vulgar o tópico, una comida de negocios? ¿Cuándo fue la última vez que sufrimos pánico al sentirnos juzgados por auténticos expertos? ¿Nunca has fantaseado con acudir a un acto solemne con tus vaqueros favoritos saltándote todo el protocolo? ¿En alguna ocasión te has quedado en blanco cuando te han pedido que digas algunas palabras? ¿No te has empecinado alguna vez en tu propia opinión impidiéndote esta actitud conocer a personas que seguro eran interesantes? ¿Te cuesta memorizar los nombres? ¿Te sientes mal ante las críticas o las aceptas con naturalidad? ¿Mides los tiempos o, por el contrario, te aferras a un micrófono hasta aburrir al más predispuesto a la escucha?Si has vivido alguna de estas circunstancias u otras similares, te damos la bienvenida al mundo de los mortales. Porque, ya lo dice el refrán, “quien tiene boca, se equivoca”. Solo que nuestra intención y empeño consiste en equivocarnos lo menos posible, romper barreras comunicativas y salir airosos sea cual sea el escenario en el que nos movemos. Si somos capaces de desdramatizar el proceso comunicativo y de adquirir buenas prácticas conseguiremos, de la mano de los curiosos tipos que pululan por estas páginas, ser unos excelentes conversadores, mediadores, negociadores, ponentes o conferenciantes y aumentaremos nuestro número clientes, contactos y, sobre todo, amigos.ÍndicePRESENTACIÓN.- PRIMERA PARTE: FRACASOS ASEGURADOS.- El cenizo.- El comodón.- El desaliñado (El poder de la imagen).- El suicida (Esos temas polémicos).- El antisocial.- SEGUNDA PARTE: TOMAR LAS RIENDAS ANTE SITUACIONES DIFÍCILES.- «¿Por qué todos me miran?» (Asistir solo a un evento).- «Desorientado en medio de la selva» (¿Alumnos o leones?).- «Olvidé tu nombre» (Esa memoria).- «Hace un tiempo estupendo» (En una comida de negocios).- «El pregón de mi pueblo» (Cómo no dormir al personal).-«Venga, di unas palabras» (Acontecimientos sociales).- «Protagonista, el otro» (Presentar a un escritor, a un conferenciante, a un científico…).- «Menos es más» (Cómo combinar credibilidad con amenidad).- «Hemos pensado en ti» (Bucear en lo desconocido).- «¿Qué delito cometí?» (Cuando te sientes juzgado por un tribunal).- Hablar en público y en privado.- TERCERA PARTE: LOS OTROS MIEDOS.- El silencio.- Los bloqueos (Quedarse en blanco).- Situaciones embarazosas.- Los tiempos (¿Medirlo o dejarlo fluir?).- Las críticas.- A MODO DE CONCLUSIÓN: El arte de practicar.- ESAS OTRAS CITAS SOBRE LA PALABRA.- BIBLIOGRAFÍA.