¡Hola, amigos voladores! Hace pocos días, el agua del lago de Fogville empezó a hervir misteriosamente. El alcalde intentó convencernos de que se trataba de una simple avería en las tuberías del pueblo, pero os lo prometo: yo vi una enorme mano verde que se asomaba de entre las aguas… Nada mejor que un paseo por las cloacas para sacar «el agua clara» del asunto, ¿no creéis?
Especificaciones de productos
Editor
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MONTENA |
Num. Edición
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1 |
Fecha edición
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01/10/2008 |
Páginas
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120 |